Desde la declaración del estado de alarma, llevamos hasta hoy más de 40 días confinados en casa para preservar la proximidad entre ciudadanos y ayudar a contener el contagio por COVID-19.
Desde entonces los centros están cerrado,aunque el curso sigue en marcha a través de la teledocencia. El profesorado ha tenido que sustituir su metodología y recursos tradicionales para seguir impartiendo sus clases y continuar el curso. Han proliferado las plataformas educativas digitales, el envío de correos y mensajes para envío y recepción de trabajos y actividades, por lo que el tiempo de exposición a pantallas y medios electrónicos de comunicación se ha multiplicado.
Por otra parte, la prohibición de salir a la calle a adolescentes, hace que el tiempo libre se "disfrute en casa" y muchas actividades que anteriormente se realizaban fuera del domicilio, se realicen adaptadas al domicilio; de ahí el deporte en casa, festivales en casa, estar con los amigos en casa y un largo etcétera de actividades realizadas en casa.
Muchas de estas actividades educativas de ocio, suponen estar delante de una pantalla (teléfono móvil, ordenador, tableta, televisión). La conclusión, los adolescentes y adultos, estamos EMPANTALLADOS.
- Debemos tomar precauciones para que este uso de pantallas no derive en un abuso y no provoque serios problemas de salud: visuales, neurológicos, posturales, etc.
- También es conveniente tener cuidado, cuando estemos en un grupo virtual, cuidar la cortesía y el respeto a los demás.
- El aburrimiento y el confinamiento puede provocar el abuso de las redes sociales
A continuación, adjunto unos
consejos para prevenir el abuso y los malos hábitos (Fuente:
PANTALLAS AMIGAS)
Para saber más, puedes consultar esta entrada titulada
EMPANTALLADOS.